Friday, February 17, 2012
Proyecto X
Desde que el ejército es ejército, ejerce tareas de inteligencia. Siempre ha sido crucial el recabamiento de datos no sólo de personas vincluadas con organizaciones sociales y grupos de izquierda, sino de cualquier ciudadano sin mayores inclinaciones terroristas. Aunque el montonerismo imperante ha intentado desmembrar las actividades de espionaje del ejército nacional, esta actividad sigue existiendo, en mucha menor escala (aunque con la invaluable ayuda de la tecnología informática) y con muchos menos agentes encubiertos.
La ministra Nilda Garré ha salido a decir que el gobierno nacional no tiene nada que ver con esta "supuesta" inflitración entre manifestantes. Lo que dice es cierto; el gobierno nacional de turno no tiene injerencia sobre la agenda encubierta de nuestro trabajo, que consiste en obtener información relevante para poder generar un mapa (puramente tentativo) selectivo de los posibles elementos subversivos, en caso de que se produzca un hecho que requiera de la intervención de las Fuerzas Armadas.
Es inusual esta difusión de una de las ramas de la actividad castrense en tiempos de paz, como si se tratara de un asunto de estado y como si se debiera esperar una orden superior para ponerla en práctica. El único asunto de estado es la seguridad nacional, y si el precio a pagar por ella es un informante secreto, es bien poco.
Pero no faltará algún funcionario pro-montonero que se sienta en la obligación de desmentir o de confirmar si le ha dado "la orden de arriba". Como si tuviera poder para ello.
Thursday, February 16, 2012
Videla con la palabra justa
"Menem y Alfonsin, cumplieron la Justicia con mayúsculas". En cambio, los Kirchner hacen "revancha" y "venganza" de los Montoneros que nunca se fueron de la política".
En las pocas ocasiones en que se le permite hablar al General, podemos advertir que su posición no ha cambiado un ápice con respecto a los viejos tiempos. Es un orgullo reconocer que las ideas siguen intactas, aunque profundamente maltratadas y desmembradas.
Hay que reconocerle al gobierno de Raúl Alfonsín que, a pesar de ese traspié que fue el juicio a las juntas, después supo realizar los pactos necesarios para pacificar la sociedad en lugar de buscar una venganza sin límites que sólo derrocharía recursos y generaría odio. La ley de Obediencia Debida, oportunamente cuestionada en su momento (pues exculpaba a los rangos bajos, pero suponía que todo rango superior era culpable de delitos, todavía no tipificados bajo la figura de la "lesa humanidad"), mostraba un espíritu superador de ese extemporáneo Juicio. La ley de Punto Final, en cambio, era un reconocimiento pleno de nuestra labor durante el Proceso de Reorganización Nacional.
Luego vendrían los Indultos de Carlos Menem y por fin una etapa de pacificación y renovación del pensamiento.
Sin embargo el montonerismo devenido en desgobierno por la "elección" del pueblo (si puede llamarse "elección del pueblo" al veintidós por ciento de votantes, lo cual configura menos del diez por ciento de la población total) no tuvo mejor idea que, entre otras cosas, remover la tierra que ya estaba seca y florida, para extraer supuestas culpas, guardadas indeleblemente en la memoria del odio, y achacárselas a los militares otrora sabiamente exculpados, creando para ellos -y sólo para ellos- la figura de los "delitos de lesa humanidad".
Nuestro General cumplirá una larga condena: no sólo no se le han respetado garantías constitucionales durante los últimos nueve años; tampoco hay esperanzas de que se las respete algún día. ¿Seguirán juzgandos sus cenizas cuando, después de su ardua vida, le toque a sus restos cremados ser parte del paisaje argentino que él mismo ayudó a forjar?
Sunday, February 12, 2012
La izquierda, siempre armada
La noticia que no sale a la luz es que, mientras grupos izquierdistas difunden fotos de la "represión", esos mismos izquierdistas -bajo la bandera del proteccionismo ambiental- habrían intentado colocar explosivos en algunos de los accesos de los camiones y amenazaron a los capataces que hacían trabajos de preparación de terreno a más de sesenta kilómetros del supuesto lugar de extracción. Uno de los trabajadores explicó ante periodistas (quienes curiosamente hasta ahora decidieron no difundir ni validar el testimonio) que fueron amenazados por "cuatro conocidos militantes de un grupo de izquierda ambientalista local" y que esos mismos militantes portaban mochilas desde las cuales sacaban algunos implementos utilizados para la colocación de explosivos plásticos del tipo C4. Aunque no llegó a concretarse esto último debido a la eficaz aparición de la policía y la llegada de la "represión", es sugestivo el hecho de que entre las amenazas al capataz estaba la de no decir que la mina no usa cianuro. "Me dijeron que si decía a los medios que la mina no usa cianuro, iba a tener un accidente", cuenta el capataz.
No es de extrañar que la izquierda, alentada oportunamente por el montonerismo imperante, esté haciendo acopio de armas y recurra a las viejas prácticas de los setenta para encarar una lucha armada y forjar un ejército paramilitar. Hoy tiene una excusa pintoresca que a más de uno le puede parecer valiosa y atendible: la lucha ecológica. Pero no hay que caer en sus trampas ni ceder un milímetro, pues la izquierda siempre tuvo la intención de subvertir el orden -cualquier orden- a punta de pistola. Preocupa la impotencia en la que está sumido el ejército, incapaz de proveer la seguridad y la paz que otrora fue su privilegio y su orgullo.
Tte (R) Daniel Huaura.
Monday, October 15, 2007
Imprudente, en negro y en moto
Hace un par de semanas tomé un taxi para ir a la obra social. El taxista estaba refunfuñando por la proliferación de bicicletas, motonetas y adefesios impresentables que se le aparecían de pronto, sin aviso y casi sin posibilidad de esquivarlos. “Lo peor es que estos tipos se cuelan por todos lados, no tienen carnet de conducir, no usan casco, van en contramano cuando pueden y, encima, si uno llegara a atropellarlos (sin querer, claro), todos los ojos nos señalan como culpables”
“Pero el problema no es el laburante. El problema está en los vaguitos que trabajan en deliverys, que no respetan ni el semáforo, van a altísima velocidad y nadie se hace responsable de las tropelías que cometen”.
¿No es momento de reconsiderar si el trabajo que ofrecen las pizzerías, los supermercados y todo lugar que necesite de delivery, es realmente un trabajo o si es una coartada para que los “locos de la moto” puedan hacer de las suyas y, encima, amparados por una empresa?
Y si la empresa no paga seguro, mantiene en negro su producción y no se hace cargo de sus empleados, ¿no deberíamos renunciar a trabajar allí, mucho antes de que ya estemos endeudados y formemos familia? Porque para que desaparezcan las malas condiciones de trabajo, hay que empezar por no aceptar un trabajo indigno.
Pero, ¿quién empieza por casa?
Cuando terminé mi viaje, le pedí un ticket al taxista. "Me hubieras dicho al principio, hermano", dijo, "ahora no te lo puedo hacer, ya le di de baja al taxímetro"
Y van...
Saturday, October 13, 2007
De un lado, pero no del otro...
Convencer a todo el mundo, incluido un presidente, de que sólo deben ser juzgados y condenados los asesinos de un lado, pero eximidos, indemnizados y glorificados los del otro, es parte de ese triunfo y es parte de ese poder. Si el justo clamor contra Von Wernich fuese, además, ecuánime, clamaría también contra los del otro lado. Pero calla.
Para Kirchner ha sido un fallo ejemplar. Dios nos libre de la ejemplaridad jurídica de un proceso basado en puros testigos hostiles. Aunque tal vez Kirchner se estuviese refiriendo a una ejemplar docilidad.
Monday, August 13, 2007
Trabajo y salud en Argentina
Pero tampoco crece si los de afuera miran hacia adentro y quieren entrar. Como en cualquier país serio, debemos implementar una política proteccionista en miras a salvaguardar nuestro territorio: cerrar las fronteras; vigilar los pasos fronterizos y no permitir -bajo ningún punto de vista- que un extranjero sea admitido en algún empleo si hubiere un argentino dispuesto a ocupar su lugar.
Nada bueno ha venido de afuera, y en especial de los países limítrofes. Dejemos en una honrosa excepción a Chile y algunos sectores de Uruguay: de Bolivia, Paraguay y Brasil sólo ha venido mano de obra barata que acepta un trabajo usurario, en condiciones que en su propio país no habría aceptado. Como consecuencia de este despropósito, el patrón ofrece menores beneficios y un sueldo miserable, propuesta que no se hubiera atrevido siquiera a esbozar si quien se postulara fuese un argentino, vecino de toda su vida y de buena familia.
A todo esto debemos agregar: ¿por qué los sistemas de salud están colapsados? Varias veces he escuchado (y yo mismo pude corroborar) que los hospitales públicos están llenos de bolivianos y paraguayos. Amén del hecho de que un argentino tiene que esperar largas horas para ser atendido, los paraguayos y bolivianos -quienes aceptan trabajos en condiciones infrahumanas-, al no poseer obra social y sufrir avatares propios de mano de obra pesada, ocupan camillas y salas de espera para paliar sus males, sin darse cuenta de que el mal mayor lo cometen ellos: venir a un país con ciertas reglas laborales y querer subvertirlas con la no muy justificable excusa de que 'en su país estaban peor'
¿Son los extranjeros la causa del derrumbe moral y político de nuestro país? Claro que no. Pero su presencia la agrava, le agrega un problema más a los millares de problemas que ya tenemos.
Saturday, April 07, 2007
PRON 2010
Desde hace ya casi tres décadas, en la Argentina hemos sufrido todo tipo de devaluaciones. Pero la que más nos interesa nada tiene que ver con el poder adquisitivo en el plano económico: se trata de una degradación en los valores. Como bien decía Plutarco, cuando la ética pierde terreno, también se viene abajo el andamiaje intelectual. Una Nación no puede construirse si no están sólidos los basamentos de la moral, la religión y la acción conforme a ellas. Donde falle un pedestal, el edificio –por muy sólido que parezca, por muy alto que haya sido construido- corre riesgo de venirse abajo.
Queremos convocar a jóvenes para salvar a la Patria.
Cuando se cumpla el segundo centenario de la Revolución de Mayo, queremos rendirle un debido homenaje.
El Proceso de Reorganización Nacional 2010 (PRON 2010) está movilizando sus fuerzas intelectuales y políticas para que el bicentenario de la patria nos encuentre más unidos que nunca, con un proyecto unitario y coherente, con un país no mediado por fuerzas políticas corruptas, con jóvenes y adultos que aspiren a un ideal de nación dejando de lado egoísmos y faranduleos. Contamos con el apoyo de vastos sectores de la política argentina –silenciados desde el comienzo de la democracia- , un amplio espectro de la Iglesia Católica, Fuerzas Armadas, Salubridad, Educación y un sector de productores agrícola – ganaderos.
Si usted está de acuerdo en fomentar las bases de nuestra Soberanía a partir del trabajo digno; si desea una educación recta y cimentada en valores éticos e intelectuales, y si está abierto a propuestas que no están en riña con los deseos más profundos del pensamiento cristiano, entonces el momento ha llegado.
El 25 de mayo de este año haremos un acto de inauguración para dar a conocer nuestras propuestas. Será en el Círculo Militar (Santa Fe 750) a las 18:00 hs.
Iremos dejando pequeños recordatorios a quienes estén interesados.
Muchas gracias.
Thursday, March 22, 2007
Gran Hermano, mínimo decoro
Debemos creer que, si la muestra tiene aceptación, es porque hay una masa que la tiene por buena, lo que me entristece ante la posibilidad de que la mayoría del pueblo esté también perdiendo su dignidad.
Sabemos que, en nombre de la libertad, el relativismo cultural desde hace tiempo inducido da lugar a cualquier conducta; ésta, al principio, es rechazada por escandalosa, mas poco a poco el acostumbramiento adormece al espíritu y la tolerancia deviene consentimiento.
Sunday, March 11, 2007
El espanto de Chavez
Monday, December 11, 2006
El asesinato de María Cristina Viola
Alejandro Olmedo Zumaran
Saturday, December 09, 2006
Memoria a medias
Monday, December 04, 2006
La injusticia con las Fuerzas Armadas
Tte. cnel. (R) José Lavori
Buenos aires
Thursday, November 30, 2006
Argentinos, a las armas
Comienzo recordando al ministro su solemne juramento al aceptar tamaña responsabilidad: "...si así no lo hiciere, que Dios y la patria me lo demanden".
Dios y la patria, representados por la población bonaerense, demandan por todos los medios y todos los dias, con sus quejas, sus lamentos, sus angustias, su impotencia e indefensión, el incumplimiento de aquellas palabras, mientras Ud. no restablece el orden ni detiene el creciente delito, crea foros de seguridad que procuran convencer a sus conciudadanos de entregar su última instancia de defensa; el arma adquirida para defender su vida y la de sus familias.
Y lo peor es que estos foros están formados por representantes de instituciones de cada población, que creen contribuir con la seguridad, como lo he hecho yo en su momento.
Como ciudadana argentina y bonaerense, no me cabe ninguna duda de cuál sería el resultado si se plebiscitara la efectividad de su gestión. Y estoy segura de que a Ud. tampoco.
Mientras miles de bonaerenses son torturados, violados, saqueados y horrorosamente asesinados, Ud. afirma que el delito ha disminuido y les pide que entreguen sus armas.
Textual suyo: "El desarme es una acción voluntaria que realiza la población que generalmente no tiene ningún compromiso con el delito y a la cual hay que persuadir para llevar adelante un trabajo de información para predisponer acciones de esta naturaleza".
Ni acepto su insulto ni me da Ud. miedo. El terror se va a terminar en la Argentina de cualquier forma. Recuerde lo que pasó en Misiones: el resto del país ha comenzado a pensar seriamente en lograr mejorar nuestra democracia y la dignidad triunfará.
Como persona de bien, enfrento la realidad y mi criterio es inverso. Creo que Ud. debería sentir un enorme dolor por el sufrimiento que el delito provoca a sus compatriotas a diario. Mientras llegue alguien que pueda resolver el acuciante problema de la creciente inseguridad, tendría que pedir a los ciudadanos no solamente mantener sus armas legales, dentro de las normas reglamentadas por el Estado, sino adiestrarlos en su uso en forma gratuita, en los Tiros Federales que se formaron para aprender a defender a la patria. Porque el que ama a su patria, al defenderla, defiende la vida de sus habitantes.
Continúa afirmando Ud: "...el desarme implica el compromiso de fortalecer la confianza en la comunidad respecto de su propio sistema de seguridad, de su propia policía, porque éste es el compromiso del Estado".
Desmenuzo sus aseveraciones, reiterándole que no podemos fortalecer la confianza respecto de su propio sistema de seguridad, porque la realidad nos ha hecho ver su fracaso y porque entregar nuestras armas, cuando el Estado fracasa, significa el suicidio.
Referente a nuestra policía, le aseguro que los ciudadanos la respetamos siempre y recurrimos a ella en los momentos de peligro.
También le recuerdo, ministro Arslanian, que nuestros gobernantes son elegidos democráticamente con nuestro voto para cumplir con un período administrativo durante el lapso constitucional, lo que significa responsabilidad en cada cargo y no la compra de la República.
En toda democracia, aun en las peores, cualquiera como yo puede sugerir ideas para revertir situaciones descontroladas y también referirse al conformismo o no de cada gestión individual de cualquier funcionario de turno. Quizás le sirva a Ud. para hacerse algún replanteo.
Con respecto a que "éste es el compromiso del Estado", no sólo lo comparto, sino que le recuerdo que es una obligación indelegable del Estado.
Solamente me queda mencionarle que los argentinos tenemos nuestra idiosincrasia, pero nos estamos dando cuenta que tenemos que pensar mucho, en vez de creer demasiado; lo sucedido en Misiones es un ejemplo que madurará día a día sin detenerse y no es otra cosa que el verdadero ejercicio de la democracia.
(Enviado por Elma Bidonde, Buenos Aires)